La Torre de Hércules es una torre y faro situado en la península de la ciudad de La Coruña, en Galicia, construida por los romanos entre los reinados de Nerón y Vespasiano. Probablemente fue proyectada por el arquitecto Caio Sevio Lupo, procedente de la Lusitania, que dejó a los pies de la Torre un epígrafe conmemorativo que por fortuna se conserva, protegido por un pequeño edículo erigido a principios del siglo XIX, que se localiza en la plataforma que sirve de base al monumento. Es el único faro romano y el más antiguo en funcionamiento del mundo y el tercero en altura de España, por detrás del Faro de Maspalomas (60 m), y del Faro de Chipiona (62 m). El 27 de junio de 2009 fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La torre perdió, posiblemente, su uso marítimo durante la Edad Media al convertirse en fortificación. En el siglo XVII (1682) el duque de Uceda encargó su restauración al arquitecto Amaro Antune, que construyó una escalera de madera que atravesaba las bóvedas hasta la parte superior, donde se sitúan dos pequeñas torres para soportar los fanales. En el reinado de Carlos III se realizó la reconstrucción completa. La obra neoclásica se terminó en 1791 bajo la dirección del ingeniero militar Eustaquio Giannini. La fachada actual de la torre es el fruto de esta remodelación. Actualmente se encuentra amenazada por una urbanización en sus inmediaciones. Según el Instituto de Estudios ‘Torre de Hércules’, supone «un gravísimo ataque al patrimonio cultural que la UNESCO reconoció a la Torre de Hércules», opinión que Hispania Nostra comparte plenamente.
La torre es de planta cuadrangular de aproximadamente 11,75 m de lado. Su altura total es de 57 m. Uno de los rasgos más característicos de este faro es la imposta helicoidal que recorre sus fachadas exteriores, desde la base hasta el remate del cuerpo prismático, y que es el recuerdo de la rampa ascendente que en época romana servía de acceso a la Torre y de la cual todavía quedaban las huellas en los muros del edificio cuando se restauró en 1789
BIC - Declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad el 27 de junio de 2009
Fue restaurada en el siglo XVIII, añadiendo 21 m de altura. Otras restauraciones se efectuaron en 1905 y en la década de los 90 del siglo XX.
La Xunta prohibió finalmente a los promotores del Agra de San Amaro construir en el entorno de la torre porque significaría la retirada de la distinción que le concedió la Unesco por lo que se retira de la Lista Roja.
Se encuentra amenazada por el proyecto aprobado por el gobierno municipal de A Coruña, que cuenta con el beneplácito de la Xunta de Galicia, de construir una serie de urbanizaciones en su entorno que constarán de un amplio aparcamiento, zonas comerciales y 333 nuevas viviendas.