Caserío Etxebarri

PATRIMONIO CIVIL, Edificios singulares

Información general

Historia:

El Caserío Etxebarri es un edificio ubicado en Llodio, localidad industrial situada al norte de la provincia de Álava. En el año 2009, debido a un incendio, se descubrieron pinturas murales que podrían situarse dentro de la pintura mural alavesa del siglo XVI (o pinceladura alavesa) estudiada por el historiador Pedro Echeverría Goñi, quien la define como una disciplina pictórica que consistía en regularizar las superficies arquitectónicas, acompañándose de historias narrativas o figurativas en zonas principales del edificio, actualizándolos al gusto renacentista del momento. Según Echeverría Goñi “por su procedimiento, motivos ingenuistas inconfundibles y paleta elemental” la autoría de estas pinturas podría ser adjudicada a Juan de Armona, pintor alavés vecino de Orduña y uno de los especialistas en “pincelar iglesias” en el segundo tercio del siglo XVI. Armona fue el autor de la pinceladura presente en otros varios lugares de la geografía alavesa, como son la capilla de Santiago en la iglesia de Agiñaga (Ayala), el santuario de Eskolunbe en Katadiano (firmado por él), la ermita de San Antón de Armuru, en Amurrio, las pinturas del ábside de la iglesia de Bachicabo, y las del caserío Ibarra en Izoria, en la que pudo ser su casa, según Echeverría Goñi.

Su singularidad radica en que este caserío es de los pocos ejemplos de arquitectura civil de la zona con fachadas pinceladas en el siglo XVI, Hasta la fecha únicamente conocemos otros dos casos: el caserío de Ibarrola ,en el barrio de Ibarra en Izoria, y el caserío de Izaga, en Okondo. Tenemos otro caso de arquitectura civil con pinceladura, el palacio Lazarraga en Zalduondo. Estas pinturas, además de aportar peculiaridad al edificio, nos han permitido datar la construcción del caserío Etxebarri

Actualmente pertenece al Ayuntamiento de Lloido y es un Bien Cultural con categoría de Monumento, en el Inventario General del Patrimonio Cultural Vasco.

Descripción:

La fachada principal del caserío Etxebarri tiene en su parte baja un portalón adintelado de dos vanos separado por una columna de piedra, y sobre él se asientan tres crujías, siendo la central más alta y amplia que las laterales, con altos voladizos. La parte baja está levantada en mampostería, mientras que la parte superior en entramado de madera y ladrillo.

Hasta su reciente caída, tenía en la crujía central, el escudo del marquesado de Urquijo. Su fachada principal está decorada con pinturas murales a partir de la primera planta, la zona de ladrillo y entramado de madera: bajo los aleros y voladizos se encuentran cenefas decoradas, en los rellenos de las tornapuntas dibujos, y en el resto se reproduce el ladrillo, uniformizándolo.

Grado de protección legal:

Monumento, en el Inventario del País Vasco.

Intervenciones:

En el año 2016 se llevaron a cabo trabajos de urgencia, absolutamente necesarios para el mantenimiento de lo que aún se conservaba hasta el momento, gracias a una partida económica del Ayuntamiento de Llodio. Una vez finalizados, se protegió la estructura arquitectónica con una cubierta metálica temporal y, de forma especial, las pinturas de la fachada con una estructura de madera. Esta acción ha dado buenos resultados y el edificio se conserva tal y como se dejó tras esta intervención. Sin embargo, en la actualidad se pretende desafectar, declarar de nuevo el estado de ruina para el monumento protegido y derrumbarlo.

Estado de conservación:

Está a punto de ser declarado en ruina precisamente porque, aunque se declaró monumento en 2011, no se protegió debidamente hasta el 2016. En esos años, tras el incendio que sufrió, el edificio fue deteriorándose rápidamente. Con todo, las pinturas murales todavía existen.