Ruinas del Real Monasterio de Santa María de la Murta

PATRIMONIO CIVIL

Información general

Historia:

En 568, bajo el reinado de Leovigildo, San Donato y sus eremitas huidos de África fundaron en el valle, llamado entonces valle de Miralles, un monasterio servitano. No obstante, con la invasión árabe en el año 711, los eremitas se dispersaron, muriendo su fundador y dejando asolado el Monasterio.

Los orígenes del mismo están documentados en el manuscrito de 1773 del Padre J.B. Morera; el cual dice que el caballero alcireño Arnau de Serra, señor de las tierras de La Murta, previa autorización del rey Pedro el Ceremonioso, donó el monasterio a un grupo de ermitaños establecidos en el valle con la condición de que viviesen bajo la regla de San Jerónimo. Tras profesar en Jávea como monjes de esta orden, el papa Gregorio XI les concedió la bula para fundar un monasterio en 1376.

El nuevo cenobio nació bajo la protección del importante Monasterio de San Jerónimo de Cotalba, cuyo prior, Fray Domingo Lloret, y un grupo de monjes fueron enviados a Alzira en 1401. El desarrollo arquitectónico del monasterio se debió a las importantes donaciones procedentes de ilustres familias como los Vich. Sin embargo, con la desamortización de Mendizábal, en 1835, el Monasterio fue clausurado.

Descripción:

Fue el 11 de febrero de 1401 cuando se iniciaron las obras de construcción del Monasterio según la norma benedictina, realzando el edificio destinado a la Iglesia y situando el resto de edificios en torno al claustro. La autoría de esta obra está atribuida a Jaime Gallent, maestro de obras de la ciudad de Valencia. Su estilo arquitectónico está enmarcado dentro del gótico valenciano. Hay que destacar que fue en esta primera etapa, en el año 1410, cuando el monasterio recibió la visita de San Vicente Ferrer. La construcción de la iglesia se estima a mediados del siglo XV, momento en el que comenzaron a sucederse diferentes donaciones.

Grado de protección legal:

BIC - Bien de Interés Cultural

Estado de conservación:

En la actualidad, el conjunto arquitectónico se encuentra en estado de abandono.