En la primera mitad del siglo XX, hacia 1934, se comenzó la construcción de los Cocherones de Gonzalo Ruiz según el proyecto del arquitecto municipal Ramón Martiarena Lascurain, ocupando parte de “los prados” de la Casa Fuerte de los Beteta y del solar anexo. Las cocheras pertenecían a la empresa de autobuses del mismo nombre cuyos coches siguen recorriendo la provincia en la actualidad.
Gonzalo Ruiz Pedroviejo fue, según la Real Academia de la Historia, “el empresario que introdujo el automóvil en la provincia de Soria”. Continuó la tradición familiar de trasporte de viajeros, pero sustituyó la tracción animal por el motor e impulsó la implantación en Soria de líneas regulares de viajeros y la segunda revolución del automóvil, así como de la mecanización de la agricultura.
Los cocherones se encuentran inventariados por la fundación DOCOMOMO ibérico de arquitectura moderna dentro de la categoría “Los equipamientos modernos – Nivel B, 1925-1965” (edificios de importante consideración regional). Ramón Martiarena Lascurain, arquitecto municipal de Soria entre 1927 a 1942, destacó sobre todo en Soria donde trabajó quince años legando una serie de edificios del movimiento moderno a la historia de la arquitectura de la ciudad de Soria y su provincia.
En los Cocherones de Gonzalo Ruiz se diferencian dos edificios de interés:
El principal, y con acceso desde la calle Sorovega, se construyó sobre la plazoleta triangular que ocupaba la antigua parroquia de Nuestra Señora del Poyo, encontrándose sus restos durante la construcción. Su planta se adapta al espacio irregular de la plaza, adosándose al perímetro amurallado del Palacio de los Beteta con una potente estructura de hormigón protegida con una cubierta de dientes de sierra. La fachada, influenciada por el art decó, presenta tres amplios portones de acceso para los autobuses y dos bandas de huecos rectangulares en las plantas superiores. La cornisa se corona con un frontón mixtilíneo.
El segundo edificio se encuentra dentro del recinto amurallado del palacio. De planta rectangular, la estructura corresponde al tipo basilical, con tres naves longitudinales, una central de 14 m de anchura y 9 m de altura, y dos laterales de 6 m de anchura y 4,5 m en su punto más alto. La nave dispone de 5 pórticos de cerchas transversales con una separación entre ellos de unos 3,5 m. Por último, la fachada presenta dos puertas con arco rebajado de acceso para los coches y un amplio hueco vertical que da luz al interior.
Sin protección específica
Buen estado de conservación. Sin embargo, los cocherones cuentan con un informe favorable para su derribo, emitido por el Ayuntamiento de Soria y la Comisión Provincial de Patrimonio desde el año 2016, pese a las reclamaciones para su protección.
Plantear su derribo va en contra no sólo del patrimonio industrial, sino de la historia y memoria reciente de la ciudad y de la provincia. La salvaguarda de los cocherones es imprescindible para comprender la introducción del automóvil en la provincia de Soria, legado de una empresa que fue protagonista a escala provincial de la segunda revolución del automóvil en España. Además, las construcciones se encuentran completamente integradas en el entorno urbano sin afectar apenas a las estructuras históricas del Palacio de los Beteta.
2021
Los restauradores, contra el derribo de los Cocherones. El Día de Soria. 22 de febrero.
Piden protección para cocherones de Gonzalo Ruiz. El Mirón de Soria. 22 de febrero.
Fundación pide a Soria proteger y conservar cocherones de estilo modernista. La Vanguardia. 30 de enero.
2019
El legado de Gonzalo Ruíz. El Día de Soria. 10 de noviembre.
2017
EL ART DECÓ DE SORIA SÍ EXISTE. Cultura Diversa. 3 de septiembre.
Enlaces
Los Cocherones de Gonzalo Ruíz de Soria en peligro de desaparecer. Patrimonio Industrial Arquitectónico.
Bibliografía
Ficha de registro en Registros del Movimiento Moderno del inventario de la Fundación DOCOMOMO Ibérico con categoría B (Edificios de importante consideración regional).