El conjunto de explotaciones mineras del municipio turolense La Cañada de Verich se localiza en la denominada Formación de Escucha. En esta misma formación se localizan carbón, minerales y rocas industriales (arenas, alumbres, arcillas…) que resultan de interés minero. Las arcillas se explotan en esta zona nororiental de la provincia de Teruel.
Las arcillas son rocas sedimentarias que se componen de minerales silicatados e hidratados de aluminio, hierro y manganeso. Las arcillas refractarias son las que afloran en La Cañada de Verich. Su explotación se efectúa en canteras con frentes de considerable amplitud. El sistema de arranque es con medios mecánicos. Aunque hubo explotación de interior, actualmente la extracción se realiza a cielo abierto. Esta arcilla se utiliza para la elaboración de ladrillos refractarios. . La explotación Santa Bárbara se localiza en la zona conocida como La Solana. Pertenece a la empresa Arcillas Extra Aluminosas S.A. No se ha podido encontrar información sobre la inauguración de las edificaciones y la explotación extractiva. En un estudio visual y respetuoso por las oficinas, los documentos más antiguos encontrados son una libreta con la etiqueta: AÑO 1.957 MINA CASTELLETS Y CARTAGENA. ABRIL, MAYO, JUNIOY JULIO y un documento oficial: DELEGACIÓN NACIONAL DE SINDICATOS. Calendario laboral para el año 1.963. El documento más moderno encontrado es el PLAN DE LABORES PARA EL AÑO 2.006 de la mina Arcilla Refractaria titulada Santa Bárbara Nº 4920 publicado por la DIPUTACIÓN GENERAL DE ARAGÓN. También hay revistas de los años setenta y ochenta, pero no hay documentación digital. Con esta escasa información se presupone que los edificios se utilizaron desde principios de la década de 1.960 hasta finales de los ochenta o principios de los noventa. En la actualidad se sigue extrayendo arcilla a cielo abierto pero la bocamina de la explotación interior y los edificios están abandonados.
La edificación de la explotación minera santa Bárbara está situada en una explanada. En el borde se sitúa el taller y pegado a la ladera de la montaña el resto de los edificios. El conjunto lo forman un taller, la caseta de la sierra mecánica, el edificio del generador, el edificio del transformador eléctrico y almacén y el edificio de oficinas y vestuario. Son edificios industriales de planta rectangular, construidos con ladrillo y pintados de blanco, marco de ventanas y puertas de hormigón y tejado a dos aguas de fibro-hormigón ondulado (uralita), menos en el caso del edificio del transformador que es de teja. A pesar del carácter utilitario de estas construcciones, tiene elementos decorativos. El taller, el edificio de la sierra y el edificio del generador en las equinas tienen pilastras decorativas de ladrillo. La parte inferior del taller está pintada de gris a modo de zócalo.
El edificio más interesante es el de oficinas y vestuarios. La fachada está adornada con cuatro molduras horizontales a diferentes alturas que rodean el edificio construidas con ladrillo macizo de canto puesto en línea. Este edificio de dos plantas tiene dos puertas. En su origen debían estar pintadas de verde. La puerta de la cara lateral da a una habitación a la derecha y a unas escaleras hacia la planta superior donde estaban las oficinas y el baño. Las paredes de la escalera y el pasillo del piso superior están alicatadas de baldosas blancas rematas por una fila de baldosas estrechas negras. Las baldosas del suelo de este edificio son gris oscuro para el pasillo y amarillo para las habitaciones. Los marcos de las puertas y de las puertas de los armarios empotrados son de color beige y las hojas de las puertas son de color verde. Las habitaciones están pintados diversos colores suaves.
Por todo el edificio hay restos de sillas y mesas de oficina de los años sesenta. Destaca una mesa de delineante y una caja fuerte. Por toda la planta superior se amontonan documentos legales y administrativos. Por la puerta de la cara principal de edificio se accede a una gran sala. A la izquierda está la enfermería que todavía conserva la camilla, y el armario botiquín. A la izquierda se entra a los vestuarios. A la entrada están los bancos corridos de hormigón de los mineros y las cadenas donde colgaban la ropa de trabajo. Hacia al fondo hay hiladas de lavabos de hormigón y las duchas de hormigón. En el vestuario todavía se conservan botas y cascos.
Sin protección específica
Empieza a ser preocupante. Las instalaciones llevan muchos años utilizándose de trastero. El edificio de la serrería se ha derrumbado y el edificio de las oficinas y vestuario ha sufrido un desprendimiento de parte del tejado. Los edificios no han sufrido vandalismo. En las pilas de documentos hay huellas de conatos de incendio.
Es uno de los pocos vestigios que son testigo de la importante actividad minera de la zona. Forma parte del pasado que da identidad a la comarca del Bajo Aragón y nos recuerda una actividad económica pasada que generaba riqueza y numerosos puestos de trabajo. Su estado empieza a ser preocupante. Las instalaciones llevan muchos años utilizándose de trastero. El edificio de la serrería se ha derrumbado y el edificio de las oficinas y vestuario ha sufrido un desprendimiento de parte del tejado. Los edificios no han sufrido vandalismo. En las pilas de documentos has huellas de conatos de incendio.
Bibliografía
BASTIDA, Joaquín, LÓPEZ-BUENDÍA, M.I: Mineralogía aplicada de arcillas constitutivas de estériles en minas de carbón de la zona minera de Teruel. Journal of Iberian Geology. January 1.993.
Hernández Navarro, M. (2016) Evaluación ambiental de la minería de arcillas en el noreste y centro de Teruel. Escuela Politécnica Superior – Universidad de Zaragoza. Recuperado a partir de: https://zaguan.unizar.es/record/60589/files/TAZ-TFG-2016-2874.pdf
V.V.A.A: Libro Blanco de la Minería de Aragón. Año 2.007. Ministerio de Educación y Ciencia. Instituto Geológico y Minero de España. Unión Europea. Fondo Europeo de Desarrollo Regional. Gobierno de Aragón. Departamento de Industria y Turismo.