Pocos datos existen sobre este castillo árabe. Estas ruinas siempre han sido confundidas con las del Castillo de Chincoya en Sierra Mágina (concretamente en el término de Bélmez de la Moraleda). Aparece ya en crónicas del siglo XIII. cuando la intensificación bélica de la zona tras la conquista por los cristianos de Baeza y Jódar, que cayó entre 1227 y 1229, convirtió a Chincoya en un castillo de frontera. Su ubicación, en el valle del Jandulilla, más que defensa de un paso estratégico entre el Alto Guadalquivir y el Surco Intrabético granadino, misión que cumplieron posteriormente en época de frontera los castillos de Solera, Belmez, Huelma y Jódar, fue de hábitat-refugio de una población de economía agro-ganadera, especialmente vinculada a las fértiles tierras de regadío que existen a su alrededor. Sancho Martínez de Jódar tomó por pacto la fortaleza de Chincoya, permitiendo vivir en ella a parte de la población musulmana. En 1243, Fernando III la concedió a Baeza con el usufructo de la misma para Sancho Martínez. Su inclusión en las Cantigas de Santa María de Alfonso X el Sabio en relación con un ardid de guerra y un milagro mariano le han dado cierto protagonismo en la Literatura y la Historia , unido a un halo de misterio en torno a su ubicación. «E dest’ oý un miragre que avo pouc’ á y en Chincoya, un castelo, per quant’ end’ eu aprendi». Además, en la zona se encuentran enterramientos árabes y restos de cerámica de la misma cultura.
En la construcción del castillo se utilizan mampuestos del mismo tipo unidos con mortero. Quedan restos de la muralla y de la torre del homenaje.
BIC - En 1993 la Junta de Andalucía otorgó reconocimiento especial a los castillos de la Comunidad Autónoma de Andalucía.
En ruina progresiva.
Camino de la pérdida total.
Bibliografía
Montoya Martínez, J. El castillo de Chincoya. Boletín Instituto de Estudios Giennenses. ; 101, p. 17-25. Jaén: Instituto Estudios Giennenses, Enero-Marzo 1980.