El castillo de Chirel se elevó sobre un monte flanqueado por las gargantas del río Júcar bajo dominio musulmán —sabemos que tuvo cierta relevancia durante la revuelta de Al-Azrak contra el rey aragonés Jaime I—. Vuelve a mencionarse en un documento fechado en 1349, donde se solicita su abastecimiento de víveres junto con las fortalezas de Chiva, Gestalar y Olocau. El aspecto actual corresponde al siglo XV, cuando se produce su primera reconstrucción. Ya en el siglo XVII ocupará un papel protagonista bajo el mandado del barón de Cortes de Pallás en el contexto de la expulsión de los moriscos: las tropas gubernamentales utilizaron el castillo como centro de operaciones en las acciones contra las guerrillas sublevadas en la Muela de Cortes, lo que permitió poner fin al conflicto en menos de un año. Tras la pacificación del territorio fue perdiendo importancia estratégica y quedó marginado en un territorio muy poco poblado. La fortaleza fue destruida en 1748 por un gran terremoto que asoló la comarca del Canal de Navarrés. Su ruina por abandono aumenta desde entonces.
El castillo se adapta completamente a la orografía del terreno, que es muy peñascoso y flanquedo por gargantas, presentando planta triangular y una excelente situación para su defensa. El acceso era complejo, ya que debía salvarse un paso elevado de aproximadamente un metro. En este paso existía un arco que en su parte exterior era apuntado y en la parte interior de medio punto. Comunicaba con un vestíbulo que en un lateral conectaba con el pasillo existente entre la doble muralla. Este tipo de entrada se repetía para acceder a la torre de vigilancia. El castillo tenía una clara finalidad defensiva que queda de manifiesto tanto en la técnica constructiva como en elementos tales como saeteras, pretiles y aspilleras, o la existencia de un fodo en uno de sus lados. Además existen dos torreones en los extremos oriental y occidental que completaban la defensa del recinto. Uno de ellos tiene planta trapezoidal y varios niveles de altura, aunque en la actualidad está derruido en el interior. El otro era de planta cuadrada y conserva aún dos niveles. En el primero todavía se observa la subóveda de cañón fabricada siguiendo la técnica del ladrillo a rosca, mientras que el segundo nivel ha perdido la techumbre. Pese a la ruina, todavía se aprecian el doble recinto amurallado, el aljibe y la torre mayor.
BIC - 16 de junio de 2002.
La Conselleria aprobó en 2005 la primera fase de actuación con la que restauraría y consolidaría las zonas más degradadas y con mayor peligro de derrumbe. En 2009 estas obras ya se habían llevado a cabo, afectando a uno de los lienzos.
Ruina consolidable.
Ruina progresiva por abandono.
2016
El hispanista Edward Cooper visita el castillo de Chirel. Las Provincias. 9 de febrero.
2015
La Edad Media a orillas del río Júcar. Las Provincias. 14 de agosto.