El convento fue fundado en el año 1486 por bula del papa Inocencio VIII para acoger a los frailes franciscanos procedentes del Convento de Santa Clara que iba a ser ocupado por religiosas de la misma orden. Del antiguo convento persiste solo la Iglesia y parte de la cerca de piedra. Ya a finales del siglo XIX se encontraba abandonado y la Iglesia fue duramente expoliada y quemada durante la Guerra Civil, desapareciendo todos los bienes muebles que aún se conservaban. Su capilla plateresca del siglo XVI se encuentra convertida en un gallinero y garaje de tractores.
El nombre se debe a la fecha de inicio de su construcción, el 16 de enero de 1488, día de los «Cinco Mártires de Marruecos». Estos fueron unos frailes franciscanos españoles cruelmente martirizados en Marruecos, en 1220, por el rey Miramamolín, a causa de su reiterado empeño de predicar en aquel país. El Convento sirvió de enterramiento a figuras ilustres, como la esposa de don Fernando de Sotomayor, los Céspedes, los Vargas, fray Juan de Robles o fray Andrés Camacho.
La iglesia tiene una esbelta bóveda de cañón y en su lado izquierdo una capilla de bóveda completa de granito, quizás única en toda Andalucía. La portada renacentista es de ladrillo que debió estar enlucido y pintado originalmente. Ésta se compone de dos cuerpos: El inferior con el vano de ingreso en arco de medio punto rebajado enmarcado por pares de semicolumnas sobre pedestal, y el superior formado por un amplio friso que contiene una hornacina central y tres pilastras a cada lado. Sobre él, en un frontón trebolado, campea un escudo de piedra granítica que ostenta las armas de don Gutierre III de Sotomayor y doña Teresa Enríquez, condes de Belalcázar y bajo cuyo patronato se fundó el Convento. Junto a la portada, en el lado superior izquierdo, hay una pequeña espadaña de un solo vano y, adosada al lado derecho o de la Epístola, otra espadaña, en este caso de importante altura y notoria presencia en la imagen del templo. La forman tres cuerpos. El inferior con dos vanos en arco de medio punto superpuestos; el central con dos huecos separados por pilastras en el mismo nivel; y el de remate, de menor anchura, con un sólo hueco.
Inscrito en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, como Bien de Catalogación General (Orden de 15 de abril de 2008).
La Consejería de Cultura llevó a cabo una actuación urgente para frenar el progresivo deterioro y el desplome de la bóveda de medio cañón que sustenta el techo de la Iglesia (Mayo 2008).
Abandonado, en ruinas y sometido a usos indebidos.
Hundimiento de la techumbre. Deterioro progresivo general. Daños por uso indebido.
2016
Lugares que debes visitar en Andalucía (antes de que sea tarde). eldiario.es, 9 de octubre