Ermita de la aldea desaparecida de Orzales. Según P. González fue quemada por los franceses en 1808. Durante la Guerra de la Independencia española, el General Verdier ordenó destruir la aldea, después de sofocar una insurrección en Logroño.
De la ermita, de estilo gótico flamígero, se conserva únicamente la cabecera. El templo estaría construido con sillería de arenisca y proyectado con una sola nave (planta rectangular y testero recto) que se reforzaría con contrafuertes en los vértices y en los muros laterales, señalando la separación de cada tramo de la fábrica. Es probable que el edificio diseñado no llegara nunca a construirse completamente (así parece indicarlo el estado de los arranques de los muros laterales que debían delimitar el segundo tramo de la iglesia). El elemento arquitectónico más relevante es la bóveda que cubre la cabecera; se trata de una bóveda de crucería con terceletes, cuyos nervios arrancan desde ménsulas colgadas. Esta solución constructiva permite fechar el momento de la edificación entre fines del siglo XV y comienzos del XVI.
Otro
En ruinas.
Hundimiento por abandono.