La fábrica fue fundada por Manuel Alonso de Huidobro, quien adquiriría en 1798 una serie de edificios en Belvís y parte de una carballeira, donde levantó una curtiduría que entró en funcionamiento en 1802, entre otros aspectos porque estos terrenos le permitía una gran disponibilidad de agua. Debido a problemas económicos, la empresa acabó siendo embargada y siendo finalmente traspasada a Santiago Harguindey Garra, un oficial vasco-francés. Continuó siendo propiedad de esta familia durante algunas generaciones, hasta que en 1899 los herederos abandonan el negocio del cuero, clausurando con ello la fábrica. Únicamente se reaprovechó una pequeña parte del establecimiento para su uso como fábrica de refrescos.
Ubicado en pleno casco histórico de Santiago de Compostela, se trata de un complejo compuesto por las estructuras destinadas a los trabajos de curtiduría, la vivienda del maestro fabricante, el molino, un gran conjunto de cobertizos y canales, etc. Lo que fuera en origen la casa y parte de edificio que albergó la fábrica de refrescos se ha rehabilitado para la disposición de una restaurante. Todos los inmuebles fueron construidos en piedra, siguiendo una misma organización, en torno a un patio o calle central por el que se comunican.
Plan Especial de Protección y Rehabilitación de la Ciudad Histórica de Santiago protege todas las construcciones y finca anexa con el Nivel 2 (Edificios de características singulares y de elevado valor arquitectónico, histórico o cultural).
En la actualidad casi todo el conjunto de edificios se encuentran en estado de completo abandono y visiblemente deteriorados, debido a la absoluta falta de mantenimiento a la que ha sido sometido desde su clausura.
Tras llevar veintitrés años en completo abandono y ruina, el ayuntamiento de Santiago de Compostela ha tomado la decisión de rehabilitarlo. No obstante, el proyecto presenta notables deficiencias, en tanto en cuanto no se respetan las características y particularidades de las edificaciones, proponiendo incluso la demolición de ciertas partes como los pilares pétreos de la nave principal o la instalación de rampas que no sólo no facilitan un adecuado acceso, sino que también rompen con la estética del lugar. Hace unos años se rehabilitaron dos de dichos edificios, pero en el proceso se derribaron estructuras de más de doscientos años, así como se ha destruido la antigua calzada que daba acceso al complejo.
Enlaces
077 Fábrica de San Nicolás de Sar. Asociación Buxa de Patrimonio Industrial.
Bibliografía
Carmona Badía, X.; Fernández Vázquez, M. T. (2003). A Compostela Industrial: Historia e pegada das fábricas de coiros no concello de Santiago. Santiago de Compostela: Consorcio de Santiago, DL.