Iglesia de San Martín de Molacillos

PATRIMONIO RELIGIOSO, Iglesias y capillas

Información general

Historia:

La Iglesia de San Martín de Molacillos fue construida a mediados del siglo XVIII sobre el anterior templo medieval, siendo impulsada su construcción por quien fuera arzobispo de Valencia, Andrés Mayoral Alonso, oriundo de la localidad (había nacido en Molacillos en 1685), quien costeó la construcción de este monumento, con unas trazas propias del barroco valenciano dadas por el arquitecto Cristóbal Herrera. Los desperfectos actuales que sufre la iglesia de San Martín de Molacillos son más graves teniendo en cuenta la relevancia artística de este templo, declarado Monumento Nacional en 1983 y único referente de la arquitectura barroca levantina en la comunidad autónoma de Castilla y León.

Descripción:

La iglesia de San Martín se sitúa en la localidad zamorana de Molacillos. Es un templo de planta de cruz latina que en su exterior presenta una elegante armonía entre sus cuatro cúpulas volteadas y una torre. Asimismo, en su interior destaca su rica decoración, teniendo el templo la gran peculiaridad de estar realizado en estilo barroco valenciano, lo que convierte a este monumento en toda una excepcionalidad arquitectónica en la Región Leonesa. Las obras se realizaron a través de la contratación de arquitectos y técnicos valencianos para erigir el templo, los cuales desarrollaron en el pueblo el estilo que dominaban.

En su cripta se enterraron en un principio los primeros marqueses de Villagodio y sus descendientes. En la capilla mayor de la iglesia está la imagen titular, San Martín partiendo su capa a los pobres. Le rodean otras dos figuras, San Pedro y San Andrés. Destaca también la presencia de una Inmaculada, que fue la imagen titular de la iglesia hasta la instauración de la de San Martín.

Grado de protección legal:

BIC - Bien de Interés Cultural

Intervenciones:

La iglesia permanece cerrada al público desde el año 2022, momento en el que fue clausurada por peligro de desprendimientos.

Estado de conservación:

Se encuentra en un estado de deterioro progresivo, con grietas y humedades visibles en la estructura interior del monumento, que van empeorando con el paso del tiempo, habiéndose registrado derrumbes parciales de material así como pérdida de parte de las pinturas decorativas del interior del templo. Por otro lado, las humedades, grietas y pérdida de material constructivo pueden acabar poniendo en riesgo la propia estructura del monumento.