A mediados del siglo XVIII, Cabreriza formaba parte del señorío de la marquesa de Berlanga y duquesa viuda de Uceda. La Iglesia de origen medieval, posiblemente se construyó originalmente como templo románico del que todavía quedan algunos restos, siendo modificado en época moderna, momento del que datan las ampliaciones de la sacristía y las dos cúpulas. A partir de la década de 1960 el municipio comenzó a despoblarse hasta que marcharon sus últimos vecinos hacía 1975, aunque las casas aún se mantuvieron en buen estado quince años después. Desde entonces el expolio ha sido intermitente, sin embargo, la mayoría de elementos importantes a excepción de la pila bautismal que fue robada, están repartidos por las proximidades para evitar la fuga histórica.
Iglesia de una sola nave con varios añadidos, como capillas y sacristía. Tiene una espadaña con dos vanos rematada por una cruz de hierro donde hasta hace bien poco hubo dos campanas, una de finales del siglo XVIII y otra datada en el siglo XIX. Los altares interiores están desmantelados. Llama la atención la decoración pintada de sus muros que esta quedando al descubierto tras la perdida del último enlucido.
Sin protección específica
Malo, el tejado se encuentra en mal estado, las falsas bóvedas hundidas, las cúpulas rajadas, el suelo levantado y recientemente fueron robadas las dos campanas de su espadaña.
Deterioro grave, probabilidad de que desaparezca.