Al norte del apeadero ferroviario de la localidad de Santa Cruz del Sil se establecieron, muy tempranamente, los primeros cargaderos mineros que darían lugar a las instalaciones de la Recuelga. El primero de los apartaderos industriales autorizados en la zona fue el solicitado por “Burgueño y Dionisio González” a principios de los años 20. Éste se renombraría a finales de esa década como “Hullas Leonesas”, sociedad participada por Victoriano González y Dionisio González. Tras la salida de este último, el apartadero sería conocido sencillamente como de “Victoriano González”, nombre de la sociedad minera promotora del vecino poblado de El Escobio a mediados de siglo. La línea de baldes que construyó esta empresa a finales de la década de 1940 buscaba conectar el Grupo minero Santa Cruz, situado en la margen izquierda del río Sil. Ésta era una explotación de difícil conexión con el ferrocarril: no sólo por las continuas crecidas del río que asolaban las riberas y arrastraban los puentes; también, por la complejidad de alcanzar los pisos situados a media ladera. Estos motivos parecen explicar la decisión de instalar el teleférico hasta la Recuelga.
El lavadero cargue de Victoriano González se construyó en la década de 1940 vinculado a la empresa Minas de Victoriano González SA. Estas instalaciones, junto al lavadero-cargue de Antracitas de Fabero conformaban el conjunto minero-industrial de La Recuelga. Estas instalaciones habían sido construidas junto a los apartaderos ferroviarios que ambas sociedades desplegaron al borde de la línea Ponferrada-Villablino, y estaban destinadas a la recepción del carbón proveniente de sendos funiculares conectados con las explotaciones mineras, para su inmediato tratamiento y trasvase al ferrocarril.
El conjunto productivo de Victoriano González SA en el entorno de La Recuelga se componía de: la explotación minera Peñarrrosas o Grupo San Cruz, situado en la margen derecha del río Sil; la línea de baldes y las instalaciones asociadas al lavadero y cargue y apartadero ferroviario en el que se incluían también laboratorios y varias dependencias.
La línea de baldes de Victoriano González se prolongaba 250 metros desde el lavadero hasta el Grupo Santa Cruz, y pese a su corta longitud destaca como uno de los últimos teleféricos íntegros que aún conservan la catenaria. Además, se distingue por la elevada altura que alcanzaba el cable, reconocible todavía en la única torreta que se conserva en el punto medio del trazado.
Como el caso de AFSA, el edificio que integra la estación de recepción, el lavadero y cargue constituye el elemento más emblemático del conjunto. Este edificio es el resultado de la yuxtaposición de la estación de las líneas de baldes yuxtapuestas con el lavadero y los cargaderos. Estos edificios definen una planta en T, perpendicular al ferrocarril, que facilitaba un circuito de recepción y retorno del cable, y un segundo itinerario interno de distribución del carbón a través del lavadero. Por su elevada altura y característico perfil, estas construcciones ofrecen una de las estampas más reconocibles de la cuenca minera berciana. A nivel constructivo, sobre el zócalo de tolvas definido por muros de hormigón armado, en su tramo medio se elevan hasta seis plantas de pórticos de hormigón armado al que se abrazan sendos cuerpos laterales que alojaban la planta de tratamiento y selección de carbón. En el caso del lavadero de Victoriano, la estructura también había sido construida en hormigón armado. Los muros del lavadero se resuelven con cerramiento ligero cerámico revocado y grandes ventanas. En su frente al río, el cuerpo central se prolonga de forma perpendicular mediante una construcción volada de pórticos de hormigón armado que en la planta superior alojaba las instalaciones de la estación de descarga del cable aéreo. Este edificio está rematado por cubiertas inclinadas de chapa y pizarra a dos aguas.
Alineado con la vía del tren, junto al lavadero de Victoriano Gonzalez, también se conservan varios edificios auxiliares levantados entre 1920 a 1950: almacenes, oficinas, laboratorios y viviendas de dirección, que ofrecen notables muestras del repertorio arquitectónico de estas empresas.
BIC - 7 nov 2024 se declara Bien de Interés Cultural con categoría de Conjunto Etnológico
2022
Entre enero y febrero de 2022 se tramitaron distintas instancias para evitar el derribo propuesto de estas instalaciones y desde entonces se han sucedido múltiples iniciativas y comparecencias sensibles de agentes locales que han tenido amplio eco en los medios de comunicación. Además, Club Xeitu, y la Cátedra de Territorios Sostenibles y Desarrollo Local UNED-ULE junto al Instituto de Estudios Bercianos y la Asociación Cultural Ferroviaria Berciana registraron sendas solicitudes de incoación de BIC, pidiendo su anotación preventiva en el registro de bienes del patrimonio de Castilla y León; con el fin de garantizar la tutela efectiva de estas instalaciones. Sin embargo, pese a las manifestaciones favorables de los responsables autonómicos del área de cultura recogidas en medios de comunicación, estas solicitudes han sido desestimadas por silencio administrativo por transcurso del plazo establecido en la regulación autonómica; formalizándose la consiguiente desprotección jurídica de este conjunto desde la administración competente en materia de patrimonio cultural
Mal estado de conservación, en peligro de caer, desvalijado y sin protección.
Para evitar se derribe y se mantenga como la historia de la minería de León.
2022
La Junta redacta un plan global del patrimonio que incluye La Recuelga. Diario de León, 13 de julio
UPL reivindica en Cortes el reconocimiento de La Recuelga como Bien de Interés Cultural. El Bierzo Noticias, 16 de junio
Salvar La Recuelga’ advierte de la “amenaza” que se cierne sobre el paisaje minero en forma de parque fotovoltaico. El Bierzo Digital, 9 de junio
Páramo del Sil y Geninvest alcanzan un acuerdo para “evitar el derribo del Lavadero de La Recuelga”, Infobierzo.com.
Enlaces
Riqueza minera de la provincia de León : suplemento 1º. Bibliotecadigital.jcyl.es