Mar Menor

PATRIMONIO NATURAL, Elementos o conjuntos de interés medioambiental o paisají­stico

Información general

Historia:

La laguna, como la conocemos hoy, se formó hace dos millones de años. Desde entonces se han sucedido varios cerramientos y aperturas conectando con el Mediterráneo, siendo la última apertura en 1869, tras el maremoto acaecido en las costas de la Región de Murcia que arrasó las encañizadas y gran parte de las dunas de La Manga.
Se tiene constancia de la presencia humana en el Mar Menor desde el paleolítico. En época romana se desarrolló una importante industria de salazones entorno a la laguna y en la época árabe se comienzan a pescar con el arte de las Encañizadas, tradición que perdura hasta la actualidad. Su riqueza pesquera mantiene a varias familias de pescadores artesanales.
Sus especiales características lo convierten en un destino turístico de gran importancia, dentro del turismo de sol y playa.

Descripción:

El Mar Menor es una albufera de agua salada del mar Mediterráneo situada en la Región de Murcia, al sureste de España. Con una superficie de 135 km2, se trata de la albufera española de mayor extensión, y una de las mayores del continente Europeo. disponiendo de valores medioambientales que le hacen contar con numerosas figuras de protección.
De forma semicircular, el Mar Menor está separado del mar Mediterráneo por La Manga, una franja de arena de 22 km de longitud y de entre 100 y 1200 m de ancho. Al norte de la misma, se encuentran Las Encañizadas, siendo estas la zona de conexión natural entre los dos mares y que recibe su nombre de este arte de pesca tradicional que aprovechaba la entrada y salida de peces por este lugar. Además, existen tres golas artificiales que conectan el Mediterráneo con el Mar Menor. De norte a sur son Veneciola, canal del Estacio y Marchamalo.
Sus aguas son someras alcanzándose una profundidad máxima de 7 m. Sus fondos estaban tapizados por praderas de fanerógamas (Cimodocea) y algas (Caulerpa). La salinidad es superior a la del Mar Mediterráneo siendo en la actualidad de 45 g/l si bien, era aún superior antes de la apertura de las golas artificiales.
En su zona sur se encuentran cinco islas o islotes de origen volcánico: tres son las llamadas islas mayores: isla Perdiguera, isla Mayor o del Barón e isla del Ciervo; y dos islas menores: isla Redonda o Rondella e isla del Sujeto.
En sus aguas se han detectado hasta 43 especies de peces, algunas de las cuales pasan todo su ciclo en la laguna mientras que otras son migratorias, destacando la población de anguila europea. La laguna es especialmente importante para el alevinaje de numerosas especies de interés pesquero.
Al norte se encuentra el Parque Natural de las Salinas de San Pedro del Pinatar donde crían numerosas especies de aves larolimícolas como la Gaviota de Audouin, el charrán patinegro, charrán común, charrancito, avoceta, chorilitejo patinegro, pagaza piconegra, morito y cigüeñuela.
De norte a sur las costas que baña el Mar Menor pertenecen a los municipios de San Pedro del Pinatar (poblaciones de Lo Pagán y Los Cuarteros), San Javier (población de Santiago de la Ribera y la mayor parte de La Manga), Los Alcázares y Cartagena (poblaciones de El Carmolí, Los Urrutias, Los Nietos, Islas Menores, Mar de Cristal, Playa Honda, Playa Paraíso y parte de La Manga), siendo el municipio con más extensión de costa del Mar Menor.

Grado de protección legal:

Forma parte de la Red Natura 2000. Declarado Zona de Especial Protección de las Aves. También es Zona de Especial Conservación, humedal RAMSAR designado por la Convención relativa a los humedales de Importancia Internacional. También está declarado como Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo designada por el Convenio de Barcelona de las Naciones Unidas.

Estado de conservación:

La laguna se encuentra gravemente amenazada por un problema de eutrofización. La continua llegada de nitratos desde los cultivos del Campo de Cartagena a partir de los años 80, ha provocado que la laguna, de naturaleza oligotrófica, haya experimentado un enriquecimiento excesivo en nutrientes que en 2016 provocó su colapso. En este año se produjo una explosión de organismos unicelulares que hicieron que las aguas pasaran de ser transparentes a adquirir un tono verdoso que impedía la llegada de la luz al fondo de la laguna, provocando de esta manera la muerte del 90% de la superficie de praderas de fanerógamas y algas. Desde entonces, la laguna no se ha recuperado y han acontecido dos episodios de mortalidad masiva de peces provocada por anoxia (falta de oxígeno en el agua), una en octubre de 2019 y otra en agosto de 2021.