La muralla medieval cristiana de Madrid es desconocida para la gran mayoría de los madrileños. Levantada hacia mediados del siglo XII y finalizada entrado el siglo XIII, comprendía un fuerte conjunto defensivo levantado con bloques de caliza y reforzado, posteriormente, con mejoras de estilo mudéjar tanto en los lienzos como en las portadas. Contó con unas 80 torres, varias albarranas y cuatro ingresos: Puerta de Moros (Plaza de los Carros), Puerta Cerrada (plaza del mismo nombre), Puerta de Guadalajara (calle Mayor) y Puerta de Balnadú (en algún punto a la altura del Teatro Real). Su trazado fue muy discutido por los historiadores a lo largo de los siglos. Algunos pudieron verla in situ. Otros la supusieron gracias a los planos y dibujos urbanos de los siglos XVI al XIX. Ya en el XX, los hallazgos encontrados en derribos de edificios y en excavaciones arqueológicas han definido, finalmente, su recorrido.
Partiendo de la muralla árabe en la zona de la Puerta de la Vega, la muralla cristiana cruzaba el barranco del arroyo del Arenal (calle Segovia) para subir el escarpado terreno hacia la calle Don Pedro, por la que discurría, además de por la calle Mancebos, hasta la Plaza de los Carros. A continuación giraba hacia el noreste entre las calles Cava Baja y Almendro hasta la plaza de Puerta Cerrada, continuando por la Cava de San Miguel hasta la calle Mayor. Cruzada ésta, descendía hacia el norte por las calles Mesón de Paños y de la Escalinata, dando un giro a poniente en la actual Plaza de Isabel II. Se desconoce cómo pudo ser el cierre septentrional de la cerca, pues los restos conservados y documentados concluyen bajo el Teatro Real. Según las teorías más recientes, los lienzos se unían a la muralla árabe en algún punto de su trazado septentrional, hacia la unión con el albacar.
BIC - La muralla medieval cristiana de Madrid tiene cuádruple protección: BIC (1954), Monumento Histórico-Artístico (1993), elemento del Recinto Histórico de Madrid (1993) en la categoría de Zona Arqueológica y elemento del Recinto de la Villa de Madrid (1995) con la categoría de Conjunto Histórico.
Al no haber sido restaurados algunos de los tramos, muchos tienen elementos edificativos de las viviendas que había adosadas a los muros, viéndose junto con los sillares del siglo XII alicatados, restos de solados, huecos de aperturas para las habitaciones, etc. En el caso del resto descubierto en el solar de la plaza de Puerta Cerrada número 4, la hipotética construcción de un nuevo edificio que oculte el ingreso al adarve y paso de ronda debe ser evitada.
Los restos conservados dentro de propiedades particulares de vecinos se encuentran restaurados y en perfecto estado de conservación, siendo la mayoría visitables. Por el contrario, aquí venimos a denunciar varios fragmentos, de titularidad municipal, que hace décadas que están esperando una restauración y consolidación, por lo que la muralla se está degradando de tal manera que será costoso frenar su desaparición. Los fragmentos en cuestión son los situados en la calle Almendro números 15 y 17, Cava Baja número 22, plaza de Puerta Cerrada número 4 y calle de la Escalinata número 21.
Humedades, desprendimientos, inclemencias meteorológicas, actos vandálicos, ocultamiento indebido en construcciones futuras.
2022
Crecerán los árboles en la muralla cristiana, El País, 12 de enero.
2018
Una muralla medieval oculta entre arbustos en pleno centro de Madrid. El País. 1 septiembre
Enlaces:
Puerta Cerrada y la muralla. Arte en Madrid.
Los restos de la muralla cristiana que se esconden en la calle del Espejo nº 12. Un sereno transitando la ciudad.
Murallas medievales de Madrid. Una ventana desde Madrid.
Murallas medievales de Madrid. Madrid a Fondo.
Murallas medievales de Madrid. Madrid Histórico.
Bibliografía:
Gea Ortegas, Mª Isabel. Las Murallas de Madrid. Ediciones la Librería: Madrid, 2008.
Gea Ortegas, Mª Isabel. Cercas, Puertas y Portillos de Madrid. Ediciones la Librería: Madrid, 2008.