Muralla Nazarí

PATRIMONIO MILITAR, Murallas

Información general

Historia:

Durante la segunda mitad del siglo XIII, la ciudad de Granada creció de forma sostenida en parte por las incursiones castellanas, entre ellas la de Alfonso X en 1281, que a finales del siglo XIII llegaron hasta las afueras de la ciudad. Por este motivo el reino nazarí se vio obligado a abordar la ampliación de las cercas defensivas: la del Nayd, comenzada ya en período almohade, y la del gran Rabad Al-Bayyazin, al norte de la ciudad.
La muralla del Albaicín fue la penúltima que se levantó en la ciudad. Fue construida entre los años 1333 y 1354 por el sultán Yusuf I, quién la levantó a instancias de su ministro Ridwan para cercar una serie de arrabales: el arrabal del Albaicín, la alcazaba Antigua, el barrio de Ajsaris y el situado a poniente de la coracha que se extendían al norte de la ciudad. Estos fueron llamados colectivamente Al- Bayyazin por ser este el nombre del arrabal más antiguo.
La muralla, comenzaba al inicio de la cuesta del Chapiz donde se unía con la del barrio de Ajsaris, bordeaba el río Darro aguas arriba, ascendía a San Miguel Alto y bajaba hasta la puerta de Fajalauza. Continuaba hasta el postigo de San Lorenzo, para terminar en la Puerta de Elvira.

Descripción:

El trazado de esta muralla, con una longitud total de unos 2.300 metros, de la que actualmente se conservan unos 1.475 metros, se adapta a la fuerte pendiente que configura la topografía del terreno en esta zona. En su trazado, se intercalaban unas veinticinco torres, así como seis puertas que, al parecer, eran las que daban acceso al interior del arrabal.
Desde el punto de vista constructivo, la muralla del arrabal del Albaicín está ejecutada con la técnica de la tapia calicostrada, una masa interior de tierra apisonada y protegida con una capa exterior o costra de mortero de cal.

Grado de protección legal:

BIC

Intervenciones:

2005– Se llevó a cabo una actuación según el proyecto de A. Jiménez Torrecillas, restituyendo parte del muro desaparecido en la brecha existente con lenguaje contemporáneo.

Estado de conservación:

Los lienzos de la muralla están erosionados, sin ningún tipo de protección ni restauración. Además, sufre actos vandálicos como la extracción de piedra, pintadas en su fachada y hay basuras que se acumulan junto a ella.