El mayor activo patrimonial de esta ciudad reside en el mimetismo en el que a lo largo de dos mil años se han fundido su paisaje de huertas y berrocales graníticos con la arquitectura y el espacio modelado por las distintas culturas —lusitanos, romanos, godos, bereberes, sefarditas, peruleros, duraznos, novohispanos,..— que la han habitado; un viaje de más de veinte siglos durante el que, por distintas razones, se renunció a urbanizar el medio urbano contiguo a los costados septentrional y occidental de su cota más elevada: en un primer momento coronada de un castellum, durante la dominación hispanomusulmana cercada por una alcazaba y un alcázar (siglos IX-X) que, junto a las de Gormaz en Soria, Mérida en Badajoz y la desaparecida muralla de Medina al Zahara en Córdoba, fue uno de los baluartes más importantes de la Marca Media de Al Andalus, como atestiguan la arqueología y las fuentes hispanoárabes como Al-Istajri o Al-Idrisí.
La visión de la ciudad medieval y renacentista de Trujillo constituye una imagen de conjunto histórico de gran representatividad: con su castillo en la parte más elevada, sus murallas, palacios, iglesias y conventos, emerge en el desierto berrocal que la rodea. Su tierra y alfoz constituyen un espacio con una gran riqueza y diversidad bioarqueológica y paisajística. Un espacio sinestético que la naturaleza y el hombre han modelado a lo largo de los siglos hasta configurar un escenario de los sentidos del que participan mancomunadamente la avifauna, la arquitectura acuática —charcas, presas, aljibes, pozos y pozas, norias, etc.—, el bosque mediterráneo, con sus retamas, encinas y chaparros, el espacio urbano con sus callejas, caminos y viarios, y un conjunto de monumentos levantados en granito que se funden con el paisaje recreando una gran escultura de tonalidades ambarinas y cerúleas. La fusión de estos elementos naturales con la semblanza modelada por el hombre a partir de la piedra de granito ha consentido que Trujillo sea una ciudad rodeada de una variedad de vistas y matices perceptuales que constituyen el mejor testimonio de su acerbo cultural, su crisol de culturas, que el viajero puede hallar por los caminos históricos que la rodean.
BIC En la actualidad forma parte, junto con Monfragüe y Plasencia, de una candidatura a Ciudad Patrimonio de la Humanidad, basada en la calidad y variedad de matices de su paisaje.
2017– El nuevo Plan General incorpora un documento titulado «Estudio y estrategia de paisaje de Trujillo y su tierra. Directrices paisajísticas para el Plan General Municipal de Trujillo», que estudia y fija la protección paisajística. El día 31 de julio de 2017 se aprobó provisionalmente el Plan General de Urbanismo de Trujillo, lo que conlleva la aprobación de la totalidad de los documentos que lo integran
Se trata de un conjunto paisajístico y periurbano donde se funden multitud de matices y patrimonios tangibles e intangibles en peligro de desaparición con la calificación urbanística dada por las normas subsidiarias municipales a los terrenos colindantes a la Autovía Trujillo-Cáceres, recién concluida.
La ejecución del proyecto hotelero previsto en el año 2010 quedó parado no llegándose a realizar ninguna intervención que alterara el paisaje. Existe además un Estudio Paisajístico en el Plan General de Urbanismo que protege en cierta medida la zona.
El principal problema derivado de la actual situación urbanística reside en que si bien una parte del berrocal sí tiene protección, otra, la inmediata a la autovía, muy cercana a la ciudad y que afecta enormemente a la totalidad del paisaje percibido desde las cotas más elevadas, no tiene protección alguna, pues se trata de suelo inadecuado para el desarrollo urbano, lo que equivale a un suelo no urbanizable común. Todo esto se concreta en que con la calificación actual en esta franja se pueden ubicar todo tipo de industrias y usos turísticos permanente. Existe el peligro inmediato de la ejecución de un proyecto de 58 apartahoteles, campo de golf, spa y centro de convenciones en mitad del berrocal, al norte de la ciudad, junto a las ruinas del convento de Franciscanos Alcantarinos. Todo ello significará la perdida de una de las señas de identidad principales de la ciudad: la fusión de su patrimonio arquitectónico con su medio natural y paisajístico que hacen de ella, junto con Ávila o Cáceres una de las ciudades más espectaculares de la Edad Media y Moderna española.
2020
La protección del berrocal en Trujillo está a falta de trámites de la Junta. Hoy, 19 de enero.
2018
El berrocal, próximo a ser declarado corredor ecocultural. El Periódico Extremadura. 28 de noviembre.
2017
El berrocal sigue esperando protección. Hoy.es, 25 de noviembre.